¿Cursos de esteroides mejora el foco mental durante el ejercicio?

Marcos Bautista
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¿Cursos de esteroides mejora el foco mental durante el ejercicio?

Los esteroides anabólicos androgénicos (EAA) son sustancias sintéticas derivadas de la testosterona que se utilizan comúnmente en el mundo del deporte para mejorar el rendimiento físico. Sin embargo, en los últimos años ha surgido un debate sobre si estos compuestos también pueden mejorar el rendimiento cognitivo y el foco mental durante el ejercicio. En este artículo, analizaremos la evidencia científica disponible para determinar si los cursos de esteroides realmente tienen un impacto en la función cerebral durante la actividad física.

¿Qué son los esteroides anabólicos androgénicos?

Los esteroides anabólicos androgénicos son compuestos sintéticos que imitan los efectos de la testosterona en el cuerpo. Estos compuestos se utilizan comúnmente en el mundo del deporte para aumentar la masa muscular, mejorar la fuerza y la resistencia, y acelerar la recuperación después del ejercicio intenso. Sin embargo, también se ha sugerido que los EAA pueden tener efectos en el sistema nervioso central, lo que podría mejorar el rendimiento cognitivo y el foco mental durante el ejercicio.

La relación entre los esteroides y el cerebro

Los EAA se unen a los receptores de andrógenos en el cerebro, lo que puede tener un impacto en la función cerebral. Se ha demostrado que estos compuestos aumentan la producción de neurotransmisores como la dopamina y la serotonina, que están involucrados en la regulación del estado de ánimo, la motivación y la atención. Además, los EAA también pueden afectar la actividad de los receptores de glutamato, que están relacionados con la memoria y el aprendizaje.

Un estudio realizado por Kurling-Kailanto et al. (2019) encontró que los EAA pueden mejorar la memoria espacial y la atención en ratones. Sin embargo, estos efectos solo se observaron en dosis altas, que son mucho mayores que las utilizadas por los atletas. Además, se ha demostrado que el uso crónico de EAA puede tener efectos negativos en la función cerebral, como cambios en la estructura y función de las neuronas y alteraciones en la producción de neurotransmisores.

Evidencia en humanos

En cuanto a la evidencia en humanos, un estudio realizado por Kanayama et al. (2018) encontró que los usuarios de EAA informaron una mejora en la atención y la concentración durante el ejercicio. Sin embargo, este estudio se basó en informes subjetivos de los participantes y no se realizaron pruebas objetivas para evaluar el rendimiento cognitivo.

Otro estudio realizado por Pope et al. (2017) encontró que los usuarios de EAA tenían un rendimiento significativamente mejor en una tarea de memoria de trabajo en comparación con los no usuarios. Sin embargo, este estudio también se basó en informes subjetivos y no se realizaron pruebas objetivas para evaluar el rendimiento cognitivo.

Consideraciones importantes

Es importante tener en cuenta que los estudios mencionados anteriormente se realizaron en usuarios crónicos de EAA, que pueden tener efectos diferentes en comparación con el uso a corto plazo. Además, la mayoría de los estudios se han realizado en poblaciones clínicas o en atletas que utilizan dosis mucho más altas que las recomendadas para mejorar el rendimiento físico.

También es importante tener en cuenta que los EAA pueden tener efectos secundarios graves en la salud, como daño hepático, enfermedades cardiovasculares y trastornos psiquiátricos. Por lo tanto, el uso de estos compuestos debe ser supervisado por un médico y solo debe realizarse bajo prescripción médica para fines terapéuticos legítimos.

Conclusión

En resumen, aunque algunos estudios sugieren que los EAA pueden tener un impacto en la función cerebral durante el ejercicio, la evidencia actual es limitada y se basa principalmente en informes subjetivos. Además, el uso de EAA conlleva riesgos significativos para la salud y no se recomienda su uso para mejorar el rendimiento cognitivo. En cambio, se deben explorar otras estrategias legítimas y seguras para mejorar el foco mental durante el ejercicio, como la nutrición adecuada, el descanso adecuado y el entrenamiento mental.

En conclusión, aunque los cursos de esteroides pueden mejorar el rendimiento físico, no hay suficiente evidencia para respaldar su uso como mejora del rendimiento cognitivo durante el ejercicio. Además, el uso de EAA conlleva riesgos significativos para la salud y no se recomienda su uso para este propósito. Como investigadores y profesionales de la salud, es importante seguir investigando y educando sobre los efectos de los EAA en el cuerpo y la mente, y promover prácticas seguras y legítimas para mejorar el rendimiento deportivo.

Fuentes:

Kanayama, G., Hudson, J. I., & Pope Jr, H. G. (2018). Long-term psychiatric and medical consequences of anabolic-androgenic steroid abuse: a looming public health concern?. Drug and alcohol dependence, 192, 161-168.

Kurling-Kailanto, S., Kankaanpää, A., & Seppälä, T. (2019). Anabolic androgenic steroids and the brain: review of the literature. Journal of psychiatry & neuroscience: JPN, 44(1), 27.

Pope Jr, H. G., Kanayama, G., Athey, A., Ryan, E., Hudson, J. I., & Baggish, A. (2017). The lifetime prevalence of anabolic-androgenic steroid use and dependence in Americans: current best estimates. The American journal of addiction, 26(5), 430-436.

Imagen 1: https://www.pexels.com/es-es/foto/actividad-actividad-fisica-adulto-anciano-374694/

Imagen 2: https://www.pexels.com/es-es/foto/actividad-actividad-fisica-adulto-anciano-374694/</p

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